La pandemia está ocasionando más alteraciones del desarrollo, agravadas por la falta de atención temprana
• Se incrementan los diagnósticos de alteraciones del desarrollo
• La atención temprana, fundamental en estos casos, no es universal
• El próximo miércoles 16 de junio entregamos más de 100.000 firmas en el Congreso reclamando la inclusión en la cartera de Sanidad y una ley
La pandemia y los efectos derivados de la misma podrían estar ocasionando un incremento de casos en los que existen problemas de desarrollo infantil, según señalan expertos en atención temprana. Según apunta Adelaida Echevarría, coordinadora del servicio de atención temprana en Cantabria:En lo que llevamos de semestre en 2021 se han incrementado sustancialmente los casos diagnosticados como alteraciones del desarrollo relacionadas con las funciones de interacción-comunicación y el lenguaje receptivo-expresivo
El número de alteraciones de interacción y/o comunicación diagnosticados en 2021 ya alcanza en esta primera parte del año el total de 2019 y supera ampliamente a lo diagnosticado durante 2017 y 2018.
Esta situación no es exclusiva de Cantabria. Aunque no nos constan la publicación de datos similares en otras CC.AA, los especialistas avalan la hipótesis del incremento de alteraciones del desarrollo. Raquel Díaz, psicóloga y directora de un centro de desarrollo infantil en Madrid, señala:
La nueva normalidad y lo que ha conllevado, como el uso de mascarillas obligatorio, ha podido dificultar y limitar la adquisición de lenguaje que, a su vez, puede influir a nivel psicológico, con conductas de esquivo, rechazo, etc.
El impacto se generaliza a otras alteraciones del desarrollo, y agravado por la brecha social. Tal y como apunta María Isabel Casbas, directora del centro de atención temprana de Lorca, en Murcia:
El desarrollo de los niños y las niñas se ha visto gravemente alterado por diversos factores asociados al momento de crisis sanitaria y social que estamos viviendo. El confinamiento generó un exceso de pantallas y una carencia de juego, pero la crisis se ha cebado especialmente con determinados colectivos, aumentando la brecha social y generando diversos problemas diversos en aquellas familias que ya estaban en situación de vulnerabilidad, que han acabado impactando en el desarrollo de las niñas y niños.
La atención temprana: un servicio fundamental y no universal en España
Estas situaciones en las que un menor presenta una alteración en su desarrollo o está en una situación de riesgo generan necesidad de lo que se denomina atención temprana. La atención temprana es el conjunto de intervenciones que se han de realizar precozmente (de ahí su nombre) sobre el menor, la familia y su entorno con el objeto de optimizar sus posibilidades de desarrollo. La casuística de situaciones en que es necesaria es muy variada y, antes de la pandemia, se estimaba que ya afectaba al menos al 10% de la población infantil menor de seis años. En estos supuestos, la precocidad en el acceso a las intervenciones es fundamental, ya que la base fisiológica de la atención temprana es la plasticidad cerebral, que adquiere su máxima expresión en los primeros años de vida.
Sin embargo, el acceso a los servicios públicos que prestan atención temprana no es universal y existe una gran disparidad en su cobertura en función de la comunidad autónoma de que se trate: si nos centramos en las intervenciones que se realizan en los centros o unidades especializadas en atención temprana y desarrollo infantil, algunas comunidades alcanzan o se acercan al 10% (umbral estimado como referencia para considerar que la cobertura está cercana a la universalidad), mientras que otras están muy lejos de ese indicador objetivo.La falta de cobertura se traduce en largas listas de espera para acceder a los servicios públicos o, peor aún, en no poder acceder a los mismos, ya que este servicio se presta hasta los 3 o 6 años, según la comunidad autónoma de que se trate.
La Plataforma por la Atención temprana reivindica una atención temprana pública y de calidad en toda España
La Plataforma por la Atención Temprana considera que el motivo de esta situación de inequidad en el acceso precoz a este servicio público está obviamente en la falta de recursos, pero que la causa raíz es la propia consideración de la atención temprana, en la mayoría de las comunidades autónomas, como un servicio vinculado al ámbito de la atención a las personas con discapacidad, dentro de los Servicios Sociales.
Creemos que el proceso de desarrollo es clave en la consideración del estado de salud de las niñas y niños, y que si se produce cualquier situación que derive en la necesidad de una atención especializada a un menor, esta debe ser abordada desde una perspectiva preventiva y de atención integral a la salud de este. El carácter multi e interprofesional de la atención al desarrollo, que implica no solo a profesionales de distintos ámbitos (sanitario, educativo, social), sino a su familia y entorno, no puede ser óbice para su vinculación al ámbito de protección de la salud.
Por ello consideramos que es necesaria la inclusión de la atención temprana dentro de la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud, pues esta es la forma en la que se garantiza, especialmente desde los servicios de gestión púbica, el derecho a la protección de la salud de todas las personas, también de las niñas y niños.
El 16 de junio, Día de la Atención Temprana, presentaremos más de 100.000 firmas apoyando nuestras reivindicaciones
El próximo miércoles, 16 de junio, coincidiendo con la celebración del Día de la Atención Temprana, presentaremos en el Congreso 100.000 firmas reclamando:
– La inclusión de la atención temprana en la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud
– La aprobación de una Ley de Atención al Desarrollo que reconozca y garantice el derecho subjetivo a un atención realmente temprana, pública, gratuita, que abarque la integridad del proceso de desarrollo infantil desde una perspectiva holística y poniendo al menor en el centro de importancia, y que ordene la actividad asegurando unos estándares de calidad mínimos en todo el territorio nacional.
Hasta el momento, el Gobierno de la Nación ha expresado su voluntad, primero a través del Pacto de Gobierno (punto 2.2.10) y después en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (Reforma 3 del Componente 18), pero sin acompañar la misma con actuaciones concretas. La fecha de desarrollo prevista para esta reforma en el Plan de Recuperación (2023) y la inexistencia de un compromiso de asignación presupuestaria lastran las esperanzas de miles de familias que se encuentran actualmente en una situación de desamparo, sumidos en largas listas de espera o excluidos parcial o totalmente del sistema de cuidados que este colectivo necesita. Es fundamental que el Gobierno priorice este tema y lo impulse decididamente.
Hemos solicitado también a todos los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados que, por su parte, impulsen las iniciativas parlamentarias necesarias tendentes a reclamar que se avancen con premura hacia los objetivos reclamados.